Monday, May 20, 2019

Cómo Estrada Palma aceptó ser presidente

Por Guillermo A. Estévez *
El 20 de mayo de 1902 en el Palacio de Gobierno en La Habana.  En el centro pueden observarse al Presidente Tomás Estrada Palma. al Generalísimo Máximo Gómez y al General Leonard Wood.
 
Cuando llegaba la hora de establecerse la nueva república de Cuba, en 1901, la mayoría de los cubanos pensaban en el Generalísimo Máximo Gómez para que rigiera los destinos del país. El hecho de que no había nacido en Cuba no importaba. Bastante ya había demostrado su amor por ella. El Generalísimo, sin embargo, no aceptó. Dijo que el era soldado, no político. Y también dijo que él sabía quien era la persona ideal para ese puesto: Tomás Estrada Palma. 

Desde 1884, cuando Don Tomás regresó de Honduras a Estados Unidos casado y con su primer hijo la familia se había establecido en Central Valley, situado a cincuenta millas al norte de la ciudad de Nueva York, donde vivió por casi 20 años. Allí habían fundado una escuela, el Instituto Estrada Palma, una verdadera institución bicultural y bilingüe que enseñaba tanto a niños latinoamericanos como a americanitos locales. 


En 1887, José Martí se apareció un buen día de visita y re-encendió la antorcha de la idea de la libertad de Cuba. Martí se sintió bien en la amistad entablada con el estadista experimentado, desarrolló un gran respeto, cariño y confianza hacia él. Martí iba a Central Valley cuando se sentía un poco desanimado, iba a hablar de la Cuba futura con Don Tomás, de educación, de economía, de política, de reconstrucción, de derechos humanos, de deberes cívicos, de la igualdad… 


Una de las últimas visitas que hizo Martí antes de partir para Cuba en su fatídico viaje fue a Central Valley. Una de las últimas cartas que escribió fue a Don Tomás. A la muerte del Apóstol, Estrada Palma tomó las riendas del Partido Revolucionario Cubano, y fue nombrado “Delegado” por unanimidad de todos los “clubes” cubanos en Estados Unidos. Poco después fue nombrado Ministro Plenipotenciario del Gobierno de Cuba en Armas.
Desde 1895 hasta el final de la Guerra Cubano -Hispano–Americana, desde Nueva York, Don Tomás dirigió el esfuerzo exterior por la independencia de Cuba. Manejó los fondos recaudados con inmenso sacrificio por los trabajadores cubanos en todos los Estados Unidos con honestidad impecable. Compró armas y municiones; organizó y envió 73 expediciones armadas en apoyo a los mambises.


También Estrada Palma estuvo a la cabeza del esfuerzo y triunfo diplomático monumental e histórico que hubo de garantizarle a Cuba su independencia, la Resolución Conjunta del Congreso de Estados Unidos, firmada por el Presidente McKinley, que declaraba, en primer lugar “que el pueblo de la isla de Cuba es, y de derecho debe ser, libre e independiente.”
Estrada Palma y su grupo ganó a la opinión pública norteamericana, desde personajes importantes hasta la gente de pueblo. Había ferias cubanas en muchas ciudades, había obras de teatro sobre “Cuba Libre;” hasta estaban expuestas en cera las figuras de Maceo y Máximo Gómez en el Museo de Cera (llamado “Eden Musée”) de Nueva York. Y obreros y oficinistas y profesionales americanos también donaban su poquito de dinero para la causa.


En el esfuerzo por la independencia la figura de Estrada Palma brilló como hombre honesto, administrador admirable y diplomático hábil. Mientras tanto, Doña Genoveva Guardiola de Estrada Palma y los seis hijos estuvieron pasando severos aprietos y necesidades económicas en el pueblito de Central Valley.
En 1898, al finalizar la guerra, Don Tomás regresó a Central Valley, a su casa, a su familia y a su Instituto. Ya habían padecido mucho; hacía falta dinero. Ya él tenía cerca de 70 años. Quería regresar y regresó al magisterio. 


La intervención americana en Cuba marchaba relativamente bien. Había paz y había reconstrucción de la infraestructura y de la destrucción devastadora e inhumana de tres años de guerra, pero más que nada, había el entendimiento entre todos del contenido de la Resolución Conjunta del Congreso de los Estados Unidos: Los americanos se marcharían y tendríamos gobierno propio.
Las elecciones presidenciales estaban señaladas para el 31 de diciembre 1901. Máximo Gómez ya había dicho redondamente que él no se postularía. En julio de 1901, el Generalísimo , impaciente, agarró a uno de sus hijos por la mano y se embarcó hacia Nueva York, a Central Valley, a hablar con “Tomasico” en su casa.
La Patria llamaba una vez más, le dijo. Había que hacer un sacrificio más. Estrada Palma –dijo Gómez– era el único capaz de iniciar los destinos de Cuba por un camino honesto. Estrada Palma conocía a los americanos, y era el único capaz de mantener la cuerda floja de que fueran amigos, pero no amos. Don Tomás lo pensó por un tiempo; recibió el apoyo por escrito de un grupo de generales mambises, y accedió a seguir sirviendo a Cuba. El 31 de diciembre de 1901, en voto popular y secreto, fue electo Presidente de la República de Cuba.


Casi seis meses después, en lo que fue por siglos el Palacio de los Capitanes Generales españoles –ahora Palacio de Gobierno– en La Habana, se unieron en ceremonia solemne el Gobernador Leonardo Wood. Y otros dignatarios norteamericanos, el Presidente Electo Estrada Palma y su Consejo de Ministros, veteranos mambises, personalidades cubanas e invitados. Al acercarse el mediodía, el Generalísmo Máximo Gómez, también presente, dijo a los que lo rodeaban su famosa frase: “Ya hemos llegado!”
A las doce meridiano el Gobernador Leonardo Wood leyó la carta enviada por el presidente Teodoro Roosevelt en la cual se le adjudicaba el gobierno de Cuba a Tomás Estrada Palma, primer presidente electo. El General Wood abrazó a Estrada Palma y ordenó arriar la bandera americana. Inmediatamente después, el General Emilio Núñez izó la bandera cubana en el Castillo del Morro, a la vista de los miles de cubanos que bordeaban el Malecón. La bandera de la estrella solitaria también se izó en el Palacio de Gobierno y en todos los edificios públicos a lo largo y ancho de la isla.


De las gargantas de la gigantesca multitud que rodeaba el Palacio de Gobierno, de los hombres, mujeres y niños frente a la entrada de la bahía en el Malecón, de todos cubanos en todos los rincones de La Habana y de las provincias brotaba: “VIVA CUBA LIBRE!” La alegría era ensordecedora. Se cantaba el Himno de Bayamo, y se tocaba el Himno Invasor, las campanas repiqueteaban en todas las iglesias, y se oían cohetes, y se veían fuegos artificiales, y banderas, y escudos y abrazos entre extraños. Era una esplendorosa expresión de la identidad cubana: júbilo, triunfo, victoria.
Los elementos de la naturaleza también cooperaron: día soleado, cielos despejados, mar azul turquí. A las doce y 20, los miembros del Tribunal Supremo de Justicia tomaron el juramento y Don Tomás Estrada Palma se convirtió en el primer Presidente de “Cuba Libre”.

* El autor es Director, Retirado del International Rescue Committee, Inc., Secretario de Derechos Humanos de la Unión de Ex-Presos Polítcos Zona Norte; Miembro del Comité Internacional de Ex-Presos Políticos Cubanos 

Saturday, May 18, 2019

Hoy, acto de investidura

LA ACADEMIA DE LA HISTORIA DE CUBA EN EL EXILIO, CORP.

INVITA

AL ACTO DE INVESTIDURA DE LOS NUEVOS ACADÉMICOS Dr. Alejandro Anreus y el Ing. Paul Echaniz

A efectuarse el sábado 18 de mayo de 2019 a la 1:00 PM en el

William V. Musto Cultural Center Image result for william musto cultural center union city
420 15th Street Union City, NJ 07087


PROGRAMA

Discurso de Investidura del Dr. Alejandro Anreus con el título de “Presencia de Roberto Estopiñán en la escultura moderna de Cuba.”

Discurso de Investidura del Ing. Paul Echaniz con el título de “Testimonio de un exilado cubano en Nueva York - Desde los 60 hasta el presente”

Discurso de Respuesta por la Dra. Liliana Soto-Marini.

Entrega de Diplomas y Conclusiones por el Dr. Octavio de la Suarée, Secretario de la Academia de la Historia de Cuba en el Exilio, Corp.

QUEDAN TODOS INVITADOS

Thursday, May 9, 2019

CINE FOCUS: EMILIA, AN UNTOLD CUBAN-AMERICAN STORY

Friday, May 10, 2019 @ 6:30 pm






Who created the Cuban Flag? Luis Pérez Tolón‘s new documentary, EMILIA, is a personal journey and search for ancestral roots to unravel the story of his ancestor, Emilia Teurbe Tolón, who sewed Cuba’s national flag while living in exile in New York in 1850.
Emilia was the first woman deported from Cuba for political insurgency. She was a 19th century woman ahead of her time and a role model for women’s contributions to the struggle for independence. An advocate for social justice, she bequeathed her assets for children’s education. Her husband, Miguel Teurbe Tolón, was a poet, political activist and a Freemason. In exile, he became a pioneer of Spanish language journalism in the United States, where he designed the flag and coat of arms. Their commitment to free Cuba from Spanish colonial oppression gave rise to the birth of the Cuban nation.
BARUCH COLLEGE
25th Street, bet. Lexington and Third Aves., NYC
5th FLOOR: SCREENING ROOM 160
SPACE IS LIMITED
Free Admission 
MUST RSVP at: info@cubanculturalcenter.org
For more info on film and trailer, click on these two links:
http://www.cubanflagemilia.com
www.emiliaproductionsmiami.com
 Luis Pérez Tolón was Director of Production and Development with Discovery Networks Latin America. His credits include: Paranal: Eye on the Universe, gold medal NY Film Festival; Jorge Luis Borges (France/Argentina/USA), and Manuela Saenzla pasión de Bolivar (Colombia/USA). Prior to Discovery, he resided in Europe where he was director of the European Union’s MEDIA Program, produced documentaries in Spain and London, including the series 1898:The Spanish-American War for Canal + Spain, History Channel UK and Discovery Channel Latin America. His award-winning independent documentary Exilio/Exile was broadcast on WNET-Independent Focus and distributed to PBS stations nationwide. Luis was born in Cuba, holds an MA from the University of Southern California in Film-Broadcasting-Anthropology. Recently he worked as Coordinating Producer in American Comandante for PBS’ American Experience.
This event is co-presented by

Wednesday, May 8, 2019

Visitando a Arsenio Rodríguez



Ralph Mendez y Enrique Del Risco junto a la tumba de Arsenio Rodríguez


Por Enrique Del Risco
 
El viernes pasado di un viaje memorable. De esos que cuando lo vives no tienes otro remedio que echar mano a pobre y abusada metáfora del sueño. Me había invitado a visitar la tumba de Arsenio Rodríguez, (el músico que más contribuyó al desarrollo de una de las tradiciones musicales más importantes del siglo XX) su más esforzado y documentado biógrafo, el colombiano Jairo Grijalba Ruiz. Un cementerio situado a unos cuarenta minutos de Nueva York, algo que en mis 22 años de vivir en esta zona me había resultado a mí, extraño ser sin licencia de conducir, inalcanzable. Nos llevaba Ralph Méndez, historiador autodidacta y uno de quienes más ha hecho por conservar viva la memoria de Arsenio, más allá de su música. Boricua tenía que ser. Y allá íbamos tres devotos a la búsqueda de su dios mayor. Tres enamorados.
El biógrafo de Arsenio, Jairo Grijalba, y Ralph Méndez

Por el camino hablábamos, por supuesto, del músico. Tuve la buena idea de preguntar si existían películas de Arsenio tocando con sonido (las pocas que circulan son pequeños fragmentos mudos) y el biógrafo me extendió su teléfono: allí aparecía Arsenio tocando el tres con sonido metálico que estuvo presente en sus últimas grabaciones. Magia, pensé. Como si aquellas fotos estáticas que había repasado montones de veces hubiesen condescendido a animarse. El viaje de la mano de Ralph fue como sobre una alfombra voladora donde lo más extraño parecía tan natural como inevitable. Así llegamos a la tumba del Ciego Maravilloso que alguna vez fue anónima y que fue el propio Ralph quien se encargó de coordinar los esfuerzos para colocar la tarja. “Desde el primer momento todas las puertas se me fueron abriendo” dijo, humilde, “como si ya estuviera decidido que debía hacerlo”. 


Luego de regreso al Bronx, escuchar al colombiano y al boricua desgranar datos minuciosos frente a la imbatible consistencia del mito. Y Ralph conduciéndonos por un barrio feo que gracias a sus observaciones se iba convirtiendo en el mundo que animóArsenio con su tres en sus últimas dos décadas de vida. Así una iglesia “Pare de sufrir” era de nuevo el Teatro Puerto Rico, una clínica el antiguo Club Tropicana, y un edificio en reparaciones, camino a convertirse en no se sabe qué, volvía a ser el Club Cubano Interamericano. 
Arsenio Rodríguez en el Club Cubano Interamericano
Terminamos el recorrido en el único sitio que seguía siendo lo que siempre había sido. La Casa Amadeo, la tienda de música del compositor Mike Amadeo fundada en 1941 como Casa Hernández por el también compositor Rafael Hernández y su hermana Victoria. Amadeo que a sus ochenta y cinco años es un monumento vivísimo a lo mejor de la música latina en el Bronx. Y en esos minutos que serán infinitos lo mismo nos habló de las rutinas de Arsenio que agarró una de las guitarras que tenía en venta para cantarnos una canción que acaba de componer.

Todo muy raro. Tan raro como aquel cuadro de Dalí en que el mismo cuando niño le levanta la piel al mar para ver qué guarda debajo. Los tres peregrinos de esa tarde teníamos un poco de niños que van despertando en la realidad vulgar una más antigua y esencial. De todo eso tuve la certeza un rato antes de llegar a la Casa Amadeo, mientras fotografiábamos la clínica que se levanta en el lugar que fue el Club Tropicana. El guardia de seguridad del lugar salió a preguntarnos, receloso, lo que hacíamos ahí. Difícil explicarle que no fotografiábamos el lugar que custodiaba sino otro que había existido allí hace mucho tiempo. Solo consiguió aplacarse un poco al escuchar la palabra “Tropicana” en la que reconoció un pasado que escapaba a sus obligaciones laborales. “No estamos retratando este edificio” le dije “sino su fantasma”. “Me gusta” me respondió, sonriendo al fin, “un fantasma”. Era la palabra que necesitaba para tranquilizarse del todo, para asegurarse que nuestras fotos correspondían a otra dimensión, la misma a la que pertenecen los sueños, la magia y los juegos infantiles. A casi nada.
Con Ralph Mendez junto a la tumba de Arsenio Rodríguez

Saturday, May 4, 2019

Acto de investidura

LA ACADEMIA DE LA HISTORIA DE CUBA EN EL EXILIO, CORP.

INVITA

AL ACTO DE INVESTIDURA DE LOS NUEVOS ACADÉMICOS
Dr. Alejandro Anreus y el Ing. Paul Echaniz

A efectuarse el sábado 18 de mayo de 2019 a la 1:00 PM en el

William V. Musto Cultural Center
420 15th Street
Union City, NJ 07087


PROGRAMA

Discurso de Investidura del Dr. Alejandro Anreus con el título de “Presencia de Roberto Estopiñán en la escultura moderna de Cuba.”

Discurso de Investidura del Ing. Paul Echaniz con el título de “Testimonio de un exilado cubano en Nueva York - Desde los 60 hasta el presente”

Discurso de Respuesta por la Dra. Liliana Soto-Marini.

Entrega de Diplomas y Conclusiones por el Dr. Octavio de la Suarée, Secretario de la Academia de la Historia de Cuba en el Exilio, Corp.

QUEDAN TODOS INVITADOS

Wednesday, May 1, 2019

Un libro recuperado


La importante revista National Geographic trae reportaje sobre un tesoro bibliográfico que se consideraba perdido. Se trata de Specimens of the Plants & Fruits of the Island of Cuba de Mrs. A.K. Wollstonecraft, un manuscrito en tres volúmenes con dibujos originales sobre la flora cubana realizados por su autora.

“I think the manuscript by Anne Wollstonecraft is of great importance,” says ethnobotanist Paul Cox, executive director of Brain Chemistry Labs in Jackson, Wyoming. “Although the plants that she profiles in her drawings and descriptions are generally common, the detailed notes she makes of indigenous uses add a whole new dimension to understanding their possible utility, and could be used today to guide researchers in discovering new pharmaceuticals.”