Wednesday, October 28, 2020

La tristeza y Dulce María

Por Guillermo A. Belt 

No hubo celebraciones del vigésimo aniversario del Grito de Yara, por supuesto, aquel 10 de octubre de 1888. La Guerra Grande había terminado oficialmente diez años antes, con la firma del Pacto del Zanjón, y sus estragos de muerte y destrucción aún eran visibles en los campos de Cuba. No tanto, en cambio, en la capital, donde la vida había vuelto a un ritmo más o menos normal, si así se le podía llamar a vivir sin la ansiada independencia de España.

 


Al día siguiente de ese aniversario no conmemorado ocurrió en La Habana un hecho de sangre. El Popular, Diario Político Independiente, de Madrid, lo cuenta así en su edición del 24 de octubre de 1888:

 

Dicen de la Habana, que en la mañana del 11 del corriente fueron hallados, brutalmente asesinados, en su residencia de la calle de Inquisidor, el opulento propietario don Domingo Sañudo y su esposa, doña Micaela Rebollo. Los cadáveres aparecieron horriblemente mutilados, al parecer, con un hacha.

No se cree que el robo haya sido el motivo del crimen, pues en la casa se han hallado intactos gran cantidad de dinero y efectos de valor. Esta trajedia (sic) es el tema de todas las conversaciones en la capital de Cuba.

Han quedado detenidos un hijo político y un criado de las víctimas.

Los esposos Sañudo eran ya ancianos, parcos en sus gastos hasta el exceso, y hacían una vida muy retirada.

La fortuna de él se calculaba en dos millones de pesos y era dueño de noventa casas.

 


Conversando con Alejandro González Acosta - a distancia y por medio de internet, qué remedio – me enteré del efecto que el brutal asesinato de sus bisabuelos maternos tuvo en Dulce María Loynaz. La tragedia abarcó también al abuelo de la poetisa, Juan Muñoz y Romay, quien se había casado con María Regla, única hija del matrimonio Sañudo, veinte años antes del terrible crimen.

 


En sus investigaciones las autoridades coloniales sospecharon que el autor de los asesinatos habría sido alguien bien conocido por las víctimas, puesto que había accedido a la casa sin violencia, siendo vox populi que el matrimonio no daba entrada a personas desconocidas. Además, como apunta El Popular, no hubo robo. Con estos elementos, de cuyo valor probatorio me permito dudar, la policía detuvo y encarceló al yerno del matrimonio Sañudo.

 

Cabe especular que las autoridades actuaron con base en un chisme malicioso. No hay otra manera de explicar que la policía supiera, veinte años más tarde, que Domingo y Micaela se habían opuesto al casamiento de María Regla con Juan. En cualquier caso, Juan Muñoz y Romay no fue inculpado, y el autor del crimen quedó impune.

 

Sería muy interesante leer el escrito presentado por Francisco de P. Sánchez y Seijas a nombre de Juan Muñoz y Romay solicitando su excarcelación en la causa seguida por el asesinato de sus suegros. Tiene 28 páginas y fue publicado en 1889 por La Tipografía. No lo encuentro en ninguna parte. Lo seguiré buscando.

 

Para finalizar, debo consignar mi parcialidad en este tema por razones de familia. John Benjamin Belt, mi bisabuelo, contrajo matrimonio con Carmen Muñoz y Romay, hermana del abuelo de Dulce María. De mi adolescencia en Cuba conservo el grato recuerdo de visitas con mis padres a la casa de Dulce María Loynaz. Creo recordar su aire un tanto melancólico. Quizás ahora sé porqué.

Saturday, October 24, 2020

Fallece en Nueva Jersey la actriz Gladys Anreus*

 

Gladys Anreus y Eugenio Hernández en una puesta de 'El oso', La Habana, 1973

El martes 20 de octubre falleció la actriz teatral Gladys Anreus en un asilo en Berkeley Heights, Nueva Jersey. Anreus contaba con 82 años y padeció de demencia durante los últimos dos años.

Tres de sus hermanas —Dinorah, Idalia y Nereyda— fueron también actrices. Idalia, su hermana mayor (a quien Gladys introdujo a la actuación) es la más conocida de ellas por su trabajo en el cine cubano.

Nacida en la Habana en 1938, Gladys Anreus comenzó a estudiar Actuación en el Teatro Universitario a finales de los 50, cuando era estudiante en la Escuela de Comercio de la Habana.

Durante estos años conoció al actor Eugenio Hernández, con quien estaría unida sentimentalmente hasta finales de los años 60.

Anreus fue miembro de los grupos teatrales Guernica, La Rueda, Conjunto Dramático Nacional, Teatro Estudio y Grupo Rita Montaner. Trabajó bajo la dirección de Julio Matas, Dumé, Ignacio Gutiérrez, Rolando Ferrer, Eugenio Domínguez, Vicente Revuelta, Berta Martínez y Héctor Quintero.

La última obra en que actuó en La Habana fue El corsario y la abadesa, en 1985. Partió al exilio a EEUU en 1988 y no volvió a trabajar en teatro.


Tomado de Diario de Cuba

Wednesday, October 21, 2020

PRÓLOGO A PANORAMA DE ENSAYOS, EL ÚLTIMO LIBRO DE ELLEN LISMORE LEEDER (1931-2020)


Mariela A. Gutiérrez*

Panorama de ensayos, la más reciente publicación de la destacada Dra. Ellen Lismore Leeder, profesora emérita de Barry University, en Miami, Florida, es un significativo potpurrí de selectos ensayos relacionados a diferentes ángulos de crítica literaria que analizan la obra de diecisiete inestimables autores cubanos y dos ilustres escritores de España.

Comienza el libro con el ensayo titulado “Versatilidad y presencia de Patria en la obra de Concepción Teresa Alzola”. Dicho ensayo analiza la obra de esta distinguida escritora cubana, enfatizando principalmente su libro póstumo, Trayectoria de la mujer cubana. La Dra. Leeder hace hincapié en el alto profesionalismo de Alzola y menciona la notable versatilidad que el total de su obra posee tanto en el campo de la lexicografía, el folklore, el refranero y la ficción. Leeder señala las virtudes de Concepción Alzola y de su obra, sobre todo por el constante amor y presencia de la patria amada en cada uno de sus libros.

El siguiente ensayo, El caimán ante el espejo, de Uva de Aragón, es enfocado por la Dra. Leeder desde la perspectiva de la hermandad cubana que se encuentra en la frágil encrucijada que le ofrecen dos polos socio-históricos opuestos que han hecho, quizás, que el país permanezca en una constante extremista, según nos dice la autora, creada por el odio entre hermanos, el resentimiento, y las ansias negativas que un buen número de cubanos guarda en su pecho y que no han podido ser reconciliadas a través de los tantos años que ha durado el conflicto político de la dividida alma cubana.

Ellen L. Leeder enfoca exitosamente la solitaria angustia existencial y la soledad del individuo en un ensayo que dedica a la actitud desesperada que expresa el controversial autor cubano Reinaldo Arenas ante la agonía, el dolor, la crueldad del ser humano, el que Leeder ha titulado “El concepto de soledad en Celestino antes del alba y en El mundo alucinante de Reinaldo Arenas”.

En “Arte y versatilidad en la poesía de Gertrudis Gómez de Avellaneda” la Dra. Leeder hace énfasis sobre la versatilidad de los poemas de la gran Tula, en poemas que reflejan siempre sus experiencias, sus preferencias y sus inquietudes. La poética de la Avellaneda es exquisita, inspirándose, según comenta Ellen Leeder, no solamente en los aspectos telúricos cubanos, sino también en el amor apasionado, del que ella tanto comprendía, y sobre todo en el sentimiento religioso, el cual reinó en su obra en los últimos años de su vida.

Por otra parte, Ellen Leeder y una servidora, a través de muchos años, hemos disfrutado como ponentes en muchos y diferentes paneles y mesas en congresos nacionales e internacionales y en publicaciones académicas relacionadas con la obra de Lydia Cabrera, nuestra ilustre escritora y etnóloga. Siempre que yo formo un panel o mesa sobre Cabrera, mi primer paso ha sido y aún es invitar a la Dra. Ellen Leeder, por su elocuente profesionalismo y su indiscutible entusiasmo en relación a la obra de Lydia Cabrera. En su ensayo “Aproximación a los árboles mágicos de Lydia Cabrera”, la Dra. Leeder abre al lector la puerta del mundo maravilloso afrocubano de las plantas y las hierbas medicinales, vistos a través de los ojos de Lydia Cabrera, nuestra máxima etnóloga cubana. Acto seguido, tenemos el hermoso y revelador ensayo que Leeder ha titulado “Lo sobrenatural y las piedras preciosas en la obra de Lydia Cabrera”, el que proporciona al lector el disfrute del mágico ambiente, lleno de simbolismo, que rodea al universo de las piedras preciosas, sus misterios, sus poderes y sus significados ocultos.  

En su ensayo “El mundo poético de María Elena Cruz Varela” podemos disfrutar la visión de Ellen Leeder en relación a las inquietudes y la desesperación de Cruz Varela frente a la opresión y al “exilio interior” que permea la obra de esta autora tan significativa del exilio cubano. La protesta secreta y oscura de María Elena Cruz Varela es ejemplo de la callada rebelión de un grupo de opositores que no ha abandonado el país y sufre cada día el régimen totalitario que impera en la isla desde hace seis décadas.

En el ensayo titulado “Acercamiento a la obra pedagógica de María Luisa Dolz” Ellen Leeder nos presenta el mundo de los hogares cubanos de antaño, visto desde la perspectiva de una gran pedagoga, digna de los más altos galardones de la pedagogía cubana. La Dra. Leeder nos presenta, despojada de sus velos, a María Luisa Dolz, educadora “patria”, a quienes algunos no conocen o ya han olvidado; ella, la pedagoga viajera y científica, la forjadora por excelencia de futuras generaciones cubanas de jóvenes instruidos, principalmente, de mujeres ilustradas, por lo tanto, libres; gran pionera de la educación cubana de a finales del siglo diecinueve.

Ellen L. Leeder en su ensayo “Leonardo Fernández Marcané y la poesía romántica hispanoamericana” nos habla del libro La poesía romántica hispanoamericana (2004) del siempre recordado educador y ensayista cubano, Leonardo Fernández Marcané, que en gloria esté. Leeder comenta sobre el serio y valioso aporte que esta publicación hizo a la literatura hispanoamericana; el libro, según enfatiza la Dra. Leeder, reúne a nueve ilustres poetas románticos de América Latina; algunos son bardos sobresalientes y otros son de bien ganada fama en toda Latinoamérica.

Ellen Leeder no se detiene únicamente a indagar la obra de reconocidos autores latinoamericanos, principalmente de origen cubano. En su libro, la Dra. Leeder le da cabida a España también; allí, en la Madre Patria, se encuentran Federico García Lorca y Ángel María de Lera, ilustres escritores peninsulares del tiempo de la cruenta guerra civil española. En sus ensayos, “El mundo dramático de Federico García Lorca” y “Dimensión existencial en la narrativa de Lera”, Leeder nos hace penetrar en la dimensión dramática de la obra poética de García Lorca y en el caso de Lera nos hace testigos de la profunda dimensión existencialista que da una fuerte unidad a sus relatos y que acompaña los elementos autobiográficos y los aspectos sociales y testimoniales que van mano a mano con la supervivencia socio-histórica del pueblo español durante los años de la guerra civil.

En “Los espacios interiores en Jardín, de Dulce María Loynaz” Ellen Leeder desea abrirnos los ojos ante los misterios de ese jardín encantado que es personaje protagónico en la novela de la ilustre escritora cubana Dulce María Loynaz del Castillo. Loynaz personifica su jardín, y la Dra. Leeder nos lo muestra a través de su propia visión de la personificación del mismo, amante, trasnochador, borracho, encantador, muralla verde y protectora. Ellen Leeder proporciona, en suma, la verdad de los pasajes poéticos que encierran los espacios interiores de la Loynaz, basándose en la expresión artística de los espacios exteriores de su encantador Jardín.

En el ensayo dedicado a la dramaturga Maricel Mayor Marsán, titulado “Universalidad y estilo en el teatro de Maricel Mayor Marsán”, Ellen L. Leeder nos presenta el cómo, a través de sus piezas teatrales, la autora se enfrenta “con valentía y determinación a exponer los graves defectos de los malos gobiernos e instituciones y por encima de todo destaca la indiferencia y abulia de los humanos ante el terrible mal de la contaminación de nuestro Mundo” (Leeder, 111). La Dra. Leeder explica en detalle estos temas universales que agobian nuestras sociedades modernas y que Mayor Marsán expone con clara intensidad en su obra, de una manera inspirada y vigorosa, apoyándose en variados y efectivos recursos literarios.

“El papel de la mujer en La noche de Ina” es un ensayo excepcional en su riqueza investigativa sobre la mujer en Cuba a través de los personajes femeninos de la exitosa escritora cubana Hilda Perera. No obstante, los personajes femeninos pererianos pueden ser de cualquier clase social de la Cuba del siglo XX. Lo importante para Ellen Leeder en su ensayo es analizar el papel decisivo que ellas poseen dentro de la obra de Perera, guiadas siempre por sus impulsos emocionales, nobles y sinceros. La edad tampoco es un problema; las heroínas de Hilda Perera son de diferentes edades; lo que importa en ellas es sus luchas, según expresa Leeder: la lucha en una patria que se desploma, la lucha de las que se niegan a ser absorbidas por el mundo que las rodea, y otras, como personajes menores, quienes por ser jóvenes son siempre exhibidas por la autora como ejemplos de ternura. En el caso de La noche de Ina, la protagonista, Irene, es una nuera que posee diferentes puntos de vista en cuanto a ideología y valores morales de los de su suegra; la Dra. Leeder expone el uso del monólogo interior por parte de Perera para develar los pensamientos y las emociones de la protagonista.

En el siguiente ensayo, “Imagen de Patria en la narrativa de Hilda Perera y Josefina Leyva”, Ellen Leeder, nos proporciona una constancia de la problemática de la Cuba de hoy, tal y como la presentan las obras de las antes mencionadas escritoras. La Dra. Leeder analiza la realidad cubana en las páginas de Perera y Leyva, desde la época pre-castrista hasta finales del siglo XX. Leeder expone además momentos claves de la historia de Cuba tal como aparecen en las novelas de ambas autoras.

Para Ellen Leeder la obra de Luis de la Paz tiende a ser testimonial, aunque el autor haya vivido ya tantos años fuera de su tierra natal. Sin embargo, en su ensayo “Vigencia de Patria en Tiempo vencido de Luis de la Paz” el lector se percata, cómo Leeder comparte con el lector la vigencia de lo testimonial en los cuentos de este vital autor del exilio cubano. La Dra. Leeder destaca esto al decir: “La presencia patria es evidente (en los cuentos de Luis de la Paz) al exponer las tribulaciones sufridas por los cubanos bajo el régimen imperante y cuando han decidido sin remedio salir hacia un exilio triste e inevitable provocado principalmente por diferentes motivos y situaciones críticas” (Leeder, 130).

Por su parte, “Versatilidad en Manuel María Pérez y Ramírez: Poesía y periodismo” es un testimonio histórico por parte de Ellen Leeder del trabajo poético de este hombre de verso y espada, quien, en el siglo XIX, a través de sus escritos y poemas, demostró su amor patriótico por su Cuba y su cultura con la pluma y en el campo de batalla. La Dra. Leeder agrega que, periodista y literario por un lado y militar por el otro, su labor intelectual, su versatilidad, han hecho de Pérez y Ramírez un creador de distinguida cualidad erudita, quien volcó su profundo amor por la patria en versos elegantes, llenos de inspirado fervor patriótico.

Ellen L. Leeder además dedica su detallado y sentido ensayo “Esther Sánchez-Grey Alba y su trayectoria literaria” a la Dra. Sánchez-Grey Alba, enfatizando su trayectoria como acreditada profesora emérita y reconocida crítica literaria, especialmente en el género teatral.

En el ensayo titulado “Esencia de patria en la poesía de Gladys Zaldívar” Ellen L. Leeder analiza la obra de esta reconocida poeta y ensayista cubana. Según Leeder es en la poesía donde el lector descubre la voz auténtica de esta autora cubana. Zaldívar, nos dice la Dra. Leeder, es una aguda investigadora, “pero es en cuanto a su expresión poética en que hallamos la verdadera trascendencia y vena original de nuestra autora” (Leeder, 145). Para Ellen Leeder lo más importante de la obra de Gladys Zaldívar es que mantiene viva, tenue y constantemente, en nuestra memoria la Cuba que todo exiliado cubano dejó atrás.

“Ideal patrio y realismo histórico en El pez volador” es el último ensayo de este libro crítico tan completo que nos regala la Dra. Ellen Lismore Leeder. En este incisivo ensayo Ellen Leeder celebra el enjundioso libro con bases autobiográficas escrito por el Dr. Eduardo Zayas Bazán, profesor emérito de la Tennessee State University y el Dr. Robert J. Higgs y que lleva por nombre El pez volador. Leeder destaca la técnica novelesca usada, la que utiliza flashbacks y el contrapunto, elementos que dan a la obra de Záyas Bazán y Higgs un interesante estilo cinematográfico. Cuba, por su parte, sigue en primera plana, como sucede en todos los otros ensayos que Ellen Leeder nos ofrece en su libro.

El afán del retorno, de alcanzar la justicia anhelada y de lograr la libertad de todo un pueblo unen en un único anhelo las páginas de este valioso libro de ensayos que, sin lugar a dudas, será lectura obligatoria en las bibliotecas universitarias de ambos continentes y será lectura instructiva y testimonial en las bibliotecas públicas nacionales e internacionales.


*Dra. Mariela A. Gutiérrez. Ensayista, conferencista, investigadora y crítica literaria. Profesora titular del Departamento de Estudios Hispánicos de la Universidad de Waterloo, en Ontario, Canadá. Se especializa en los estudios afro-hispánicos (principalmente Cuba) y en la literatura femenina latinoamericana del siglo XX y es la principal especialista de la obra de la ilustre autora cubana Lydia Cabrera. Autora de ocho libros y ciento diez artículos y ensayos. Merecedora de siete premios internacionales y numerosos premios nacionales entre los que se encuentran la Medalla de Honor de Bagnère de Bigorre (2004, Pirineos Franceses), el University of Waterloo Award for Excellence in Research (2006), el University of Waterloo Distinguished Professor Award (2009), el Premio Educadora del Año 2011 de la National Association of Cuban American Educators (NACAE). Es Miembro Numerario de la Academia Norteamericana de la Lengua Española (ANLE) y Miembro Correspondiente de la Real Academia Española de la Lengua (RAE), Es Miembro Pleno de la Academia de la Historia de Cuba en el Exilio, Corp. (AHCE).

 

 

Tomado de:

Lismore Leeder, Ellen. Panorama de ensayos. Nueva York: Editorial de la Academia de la Historia de Cuba en el Exilio, 2020. Págs. 11-17.

Saturday, October 17, 2020

FALLECE LA ACADÉMICA ELLEN (LISMORE) LEEDER

Con sumo pesar damos la noticia del fallecimiento en el día de ayer de la destacada hispanista y miembro de nuestra institución Ellen (Lismore) Leeder. Nacida en La Habana en 1931 llegó a los EE.UU en 1959. En su país natal había alcanzado el grado de Doctora en Filosofía y Letras otorgado por la Universidad de La Habana. Luego, en el exilio, obtuvo un Máster en Artes y un nuevo doctorado en la University of Miami. Se dedicó a la docencia desde 1960 hasta 2006 en Barry University, en el estado de Florida, además de impartir regularmente cursos de verano en Madrid. Su labor en las aulas universitarias la complementaba con presentaciones en congresos académicos y conferencias en instituciones culturales, donde siempre se destacó por el profesionalismo de sus investigaciones y la certeza de sus juicios críticos. La lista de sus publicaciones en prestigiosas revistas académicas es inmensa. Fue autora, además, de varios libros relacionados con la cultura hispánica tales como El desarraigo en las novelas de Ángel María de Lera (1978), Justo Sierra y el mar (1979) y Dimensión existencial en la narrativa de Lera (1992). También se dio a conocer como coautora y/o editora de otras obras más. Su última entrega en ese campo fue la edición del libro inédito de su padre The Capture of Havana, de Thomas Lismore, que apareciera en 2019 bajo el sello de nuestra Editorial. Fue miembro activo de importantes organizaciones del exilio cubano tales como la NACAE (Asociación Nacional de Educadores Cubano-Americanos), el PEN Club de Escritores Cubanos del Exilio, el CCP (Círculo de Cultura Panamericano) y nuestra corporación, entre otras. La cultura cubana del exilio ha perdido a uno de sus más reconocidos baluartes, tanto en lo académico como en la vertical actitud histórica en pro de la libertad de Cuba que mantuvo siempre. Vayan hasta sus familiares, amigos y colegas las más profundas condolencias de nuestra entidad, que también está de luto.

Nueva York, 16 de octubre de 2020
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Junta Directiva

Academia de la Historia de Cuba en el Exilio, Corp.

Ellen Lismore Leeder (1931-2020)


 

Sensible fallecimiento


Es con profunda pena que anunciamos el fallecimiento de la Dra. Ellen Lismore Leeder, ex presidenta de NACAE el jueves 15 de octubre de 2020.
La Dra. Leeder nació en La Habana en 1931 y llegó a los Estados Unidos en 1959. En Cuba obtuvo el título de Doctora en Pedagogía de la Universidad de la Habana, y más tarde la Maestría (M.A.) y el Doctorado (PhD) en Filosofía y Letras de la Universidad de Miami. Fue profesora de Lenguas y Literatura Hispánicas en Barry University de Miami Shores, desde 1960 hasta 2006 en que se jubiló con el título de Profesora Emérita.
La Dra. Leeder se especializó en la literatura contemporánea de Cuba y España. Dictó cursos en programas de verano en Madrid, España y en múltiples congresos nacionales e internacionales. Fue coeditora con el Dr. Luis A. Jiménez de El arte narrativo de Hilda Perera. Fue miembro del Consejo de Directores de NACAE y presidenta de su Comité Ejecutivo donde se distinguió por sus invaluables servicios a nuestra asociación. Ella fue también miembro del PEN Club Cubano en el Exilio, del Círculo de Cultura Panamericano de New Jersey, de la Academia Cubana de la Historia de Cuba en el Exilio de New York y del Club de Leones de Miami, entre otras muchas organizaciones.
Desde el punto de vista personal, fue una esposa amantísima, devota madre, orgullosa abuela y amiga entrañable. Su desaparición deja un hondo vacío en todos los que tuvimos el gusto de contarla entre nuestros colegas de NACAE. Nuestra asociación está de luto ante tan irreparable pérdida y por esta vía enviamos nuestro más sentido mensaje de condolencia a su familia. Que descanse en paz.

DR. FEDERICO JUSTINIANI

Friday, October 16, 2020

De un informe de 1967 sobre Cuba de la comisión interamericana de derechos humanos de la OEA



 

A.    Pena de muerte por fusilamiento, sin garantías procesales ni derecho de defensa.

1.       El 25 de mayo de 1963 el Gobierno dictó una ordenanza militar a sus fuerzas armadas, disponiendo que cualquier campesino que sea visto fuera de su casa después de las ocho de la noche y antes de las cinco de la madrugada, será fusilado sin celebrarle juicio, por el oficial del Ejército o de la Milicia, levantándose sólo un acta, donde conste que el campesino estaba fuera de su casa en horas comprendidas entre las mencionadas.  Esta ordenanza ha tenido por objeto reprimir inhumanamente las legítimas protestas de los campesinos por las condiciones de opresión y miseria a que han sido sometidos.  Durante la última quincena de junio (15 al 30 de dicho mes), fueron fusilados sin previo juicio dieciocho campesinos en la provincia de Pinar del Río, veintiuno en La Habana, ciento diecisiete en Matanzas, ochenta y siete en Las Villas, once en Camagüey y noventiuno en Oriente, o sea, en total, trescientos cuarenta y cinco campesinos fusilados.  Esta matanza de seres humanos ha continuado sin cesar.  [1] 

2.       El 15 de agosto de 1963 siete jóvenes campesinos fueron arrestados en la zona de Jaruco, provincia de La Habana.  Al día siguiente fueron fusilados en el parque público de aquella localidad, sin haberles permitido la menor defensa.  Este fusilamiento se hizo en presencia del público y delante de un numeroso grupo de milicianos que insultaron y vejaron previamente a los siete campesinos fusilados.  [2] 

3.       El 29 de enero de 1965 fue fusilado en la Fortaleza de La Cabaña el obrero Joaquín Puebla Rueda, que había sido condenado por un Tribunal Revolucionario a treinta años de prisión.  La ejecución se llevó a cabo sin que la motivara sentencia alguna.  [3] 

4.       El día cuatro del pasado mes de octubre (1965), en la ciudad de Holguín, fueron fusilados los líderes sindicales Natalio Hernández Cancio y Elpidio Vidal Carpeño, condenados por un tribunal revolucionario por imputaciones de desafección al régimen.  En el juicio no se les permitió ejercitar el derecho de defensa ni se les brindó oportunidad para proponer y practicar pruebas.  [4] 

5.       En la última semana del presente mes fue fusilado en la Fortaleza de La Cabaña el campesino de la zona de Güines, José García hijo, de veintiocho años de edad, que fue acusado ante un tribunal revolucionario de actividades contrarrevolucionarias, habiéndosele celebrado juicio sin ofrecérsele la menor posibilidad de defensa.  [5] 

6.       Recientemente, en la ciudad de Camagüey fue fusilado el señor Rolando Casero Pérez, acusado de contrarrevolucionario y condenado a la pena de muerte por tribunal revolucionario sin habérsele brindado el más mínimo derecho de defensa ni las garantías necesarias para ser juzgado por un tribunal independiente e imparcial.  [6] 

7.       Denunciamos el fusilamiento ocurrido en días pasados, en la Fortaleza de La Cabaña, en La Habana, del joven de 18 años de edad nombrado Teodoro Fernández, quien fuera activo militante de la Juventud Católica Cubana. 

Consignamos en esta propia denuncia que un hermano menor del infeliz Teodoro, nombrado Dagoberto, fue detenido igualmente por las autoridades y obligado a presenciar la ejecución del primero.  [7] 

8.       El día 3 del actual mes de noviembre de 1964, fueron fusilados en Isla de Pinos Miguel Conde Grim, Elio de Armas Ayala y Abel Galante Borondt, este último ex-sargento del MINFAR.  La sentencia que dispuso la ejecución fue dictada por el Tribunal Revolucionario número 1 de La Habana, constituído en Nueva Gerona (Isla de Pinos).  De acuerdo con el sumario los cubanos ejecutados trataron de escapar al extranjero en un barco pesquero cubano denominado  "Tres Hermanos"  siendo apresados al salir.  [8] 


9.       El 18 de diciembre (1964) fue fusilado en la Fortaleza de la Cabaña el Profesor de la Universidad de la Habana Aurelio Martínez Ferro, que fue acusado ante un Tribunal Revolucionario de desafecto al régimen.  Se le sometió a juicio sin garantía alguna, negándole el derecho de defensa.  El fusilamiento del Profesor Martínez Ferro se ocultó a sus familiares y allegados que se interesaban por conocer el desarrollo del proceso y no se dio a la publicidad hasta transcurridos tres meses.  [9] 

10.      La prensa comunista de Cuba dio la noticia en los primeros días de este mes (Diciembre de 1964) de que el 17 de noviembre ppdo. Fue fusilado el exmiembro del Ejército Rebelde, Servelio Licea Fernández, condenado por un Tribunal Revolucionario de Santiago de Cuba, por realizar actos contrarios a la revolución.  Estos tribunales no ofrecen a los acusados las garantías necesarias para su defensa; y no se expresa si el fallo fue objeto de apelación, ni ante qué tribunal se ventiló este recurso, en su caso.  [10] 

11.      El día 21 de los corrientes (diciembre de 1964) la radio comunista de Cuba anunció en San Juan y Martínez, provincia de Pinar del Río que fueron fusilados Ricardo Ulloa Olivera, Daniel Montero Camalier y Desiderio Valladares y condenados a prisión otros acusados.  Fueron acusados de integrar una organización  "Frente Unido Occidental"  que lucha contra el régimen comunista de Cuba.  A los encartados no se les permitió utilizar el derecho de defensa.  [11] 

12.      El Dr. Bienvenido Alvariñas, abogado en ejercicio en Cuba, fue arrestado por la policía política represiva del Gobierno de Cuba y acusado falsamente ante un tribunal revolucionario, de realizar actividades contra el Gobierno, celebrándose un juicio en el cual no tuvo la menor posibilidad de defensa, siendo condenado a la pena de muerte y ejecutado por fusilamiento en la Fortaleza de La Cabaña de La Habana, teniéndose conocimiento de dicho fusilamiento por parte oficial del Gobierno de Cuba, dado a conocer el 2 de junio de 1965.  [12] 

13.      El 9 de agosto de 1965, según anunció el Gobierno de Cuba, fueron ejecutados Roberto Fernández Cobo, Jorge Raúl Pereira Castañeda y Roger Sabino Sopena Hinojosa, a los que no se les ofreció garantía alguna en la defensa.  El primer comunicado oficial informaba que los fusilados pertenecían a una organización de espionaje, subversión y sabotaje de los barcos mercantes de Cuba.  Posteriormente al fusilamiento se publicó que se trataba de proxenetas, contrabandistas y traficantes de drogas, siendo lo cierto que los cubanos referidos eran tres honorables marinos que no cometieron otro delito que el de no someterse al régimen comunista.  [13] 

14.      Recientemente fue fusilado en la población del Caney, próxima a Santiago de Cuba, el ciudadano Rolando Agüero, acusado de realizar propaganda contra el régimen comunista de Cuba.  Agüero fue juzgado por un tribunal revolucionario sin brindársele el derecho de defensa, y condenado a la pena de fusilamiento.  [14] 

15.      En la segunda decena de agosto de este año (1965), el Reverendo Alonso Gonzáles, Ministro de la Iglesia Episcopal, fue arrestado en Guantánamo, y sometido a juicio ante un tribunal revolucionario, sin permitirle la más mínima defensa.  Fue condenado a muerte por fusilamiento.  La apelación de la sentencia fue conocida rápidamente y casi inmediatamente se procedió a su fusilamiento.  [15] 

16.      La semana anterior (septiembre de 1965) fue detenido en Guanajay, provincia de Pinar del Río, el fotógrafo Mariano Escopet, que ejercía en la población de Cabañas, próxima a aquel lugar.  Sometido a juicio ante un tribunal revolucionario, no se le ofreció la menor posibilidad de defensa.  Fue condenado a muerte por fusilamiento y ejecutado.  Al siguiente día sus familiares tuvieron conocimiento del hecho.  [16]

17.     Hace poco fueron detenidos en Consolación del Norte, provincia de Pinar del Río, los ciudadanos cubanos Carlos Báez, Vicente Cobas y Pipo Cruz, acusados de realizar campaña contra el régimen comunista.  Juzgados por un tribunal revolucionario -que no se les permitió defenderse-  fueron condenados a muerte y fusilados en la plaza pública.  [17]

18.     A fines del pasado mes de febrero (1966) el Tribunal Revolucionario de Pinar del Río, juzgó a un grupo de militares rebeldes, entre ellos al ex-Capitán Lulo Díaz Ortega, que fue condenado a la pena de muerte y fusilado en la jefatura del Distrito de la provincia.  En el simulacro de juicio no se permitió a los acusados aportar pruebas ni ejercitar el derecho de defensa.  [18] 

19.      El día 3 de marzo actual (1966) el ciudadano cubano Ramón Cubeñas, fue acusado de desafecto al régimen y juzgado por un Tribunal Revolucionario en Manzanillo, provincia de Oriente, que se constituyó en un teatro de la localidad.  En ese juicio no se le permitió ejercitar el derecho de defensa al acusado ni el de aportar pruebas, siendo condenado a muerte.  Tan pronto se produjo la condena, fue trasladado a la ciudad de Bayamo donde se realizó el fusilamiento.  [19] 

20.      En el curso de la presente semana (mayo 18, 1966) los hermanos Leopoldo y Cundo Herrera de 20 y 22 años de edad respectivamente, vecinos del Central China, ubicado en el pueblo de San Francisco, en la Provincia de Matanzas, fueron condenados a muerte por un Tribunal Revolucionario que no les brindó las garantías necesarias para su defensa ni les permitió aportar pruebas y designar abogado defensor.  El fusilamiento de los  hermanos Herrera se llevó a efecto en  el Reparto La Cumbre, barrio de Versalles en la ciudad de Matanzas.  [20]

21.      El día 30 de abril (1966) fue fusilado en la fortaleza de la Cabaña el joven de veinte años de edad Rafael Vazquez, que fue juzgado por un Tribunal Revolucionario acusado de ser desafecto al régimen comunista.  En el expresado juicio no se le permitió la más mínima defensa, siendo condenado a la pena capital sin oírlo.  [21]

22.      El pasado mes de junio  (1966)  el joven obrero del transporte, de 25 años, Pedro Raúl Chacón Orellana, fue acusado ente el Tribunal Revolucionario de la Cabaña de desafecto al régimen, sin que se le permitiera posibilidad alguna de defensa y condenado a muerte.  Fue fusilado en la propia Fortaleza La Cabaña.  [22] 

23.      En los primeros días del actual mes de julio fue detenido el obrero cubano Segundo Sebastián Portas Montero, acusado de desafecto al régimen habiendo sido ingresado en la prisión de la Fortaleza de La Cabaña.  En la semana que cursa (julio de 1966), fue sometido a juicio ante el Tribunal Revolucionario que funciona en dicha Fortaleza, y sin que se le permitiera utilizar los más elementales medios de defensa fue condenado a muerte y fusilado.[23] 

24.      El Tribunal Revolucionario de La Habana condenó a la pena de muerte al joven Raúl Rodríguez Mizel, de 24 años de edad, acusado de manifestarse contra el régimen imperante en Cuba.  El fusilamiento se realizó en la Fortaleza de La Cabaña, después de un aparente juicio en el cual el acusado no pudo ejercitar el derecho de defensa ni se le brindaron las más elementales garantías jurídicas.  [24] 

25.      Un Tribunal Revolucionario de La Habana impuso la sanción de muerte por fusilamiento al joven Anselmo Suárez Amorós, campesino residente en la zona de Güines, provincia de La Habana, por la sola acusación de ser anticomunista.  El fusilamiento tuvo lugar en la Fortaleza de La Cabaña, después del simulacro de juicio en el cual no se permitió usar el derecho de defensa al acusado, ni se le brindaron las más elementales garantías procesales.  [25] 

26.      El Tribunal Revolucionario de La Habana condenó a muerte por fusilamiento al joven Angel Rubio Figueras, acusado de labores contra-revolucionarias, siendo fusilado en la Fortaleza de La Cabaña en La Habana, después de haber sido sometido a un juicio en que no se le permitió defenderse ni se le brindaron las más elementales garantías procesales.  [26] 

B.      Ametrallamiento de ciudadanos 

27.      El día 24 de octubre  (1964),  miembros de la Policía Represiva G2, ametrallaron a cuatro cubanos -que según la radio del país-  se encontraban asilados en el Embajada del Uruguay, produciendo la muerte a uno de ellos e hiriendo gravemente a los tres restantes, con flagrante violación de la condición de asilados que tenían las víctimas de ese criminal ataque.  [27] 

28.      El día 23 de octubre de este año  (1966)  un grupo de jóvenes cubanos decidió salir de Cuba nadando desde la Costa del poblado de Caimanera, en la provincia de Oriente, hacia la base naval norteamericana de Guantánamo.  Cuando los jóvenes se habían lanzado al mar y se encontraban nadando, fuerzas armadas del denominado  "Batallón Fronterizo"  del Gobierno de Cuba, los persiguieron en una lancha y los ametrallaron.  Tres de los jóvenes fueron asesinados, siendo identificados dos de ellos que eran Pedro Baraña de 35 años y Francisco Arcano Galano de 21 años, cuyos cadáveres fueron encontrados flotando en las aguas de la Bahía de Guantánamo.  [28] 

C.       Asesinatos de presos, muertes y suicidios por maltratos y enfermedades. 

29.      Denunciamos ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos la misteriosa desaparición de un líder sindical, que  estaba preso en la tenebrosa prisión de Isla de Pinos, en Cuba. 

El líder se nombra Orlando Alayón, preso número 30945, Circular número 4, en la mencionada prisión, quien ha desaparecido misteriosamente y los familiares no han podido obtener una información oficial sobre su paradero. 

Orlando Alayón era secretario general de la Unión de Vendedores en la Provincia de Matanzas, y fue detenido a principios de 1960, habiendo sido condenado a 20 años de prisión.  [29] 

30.      Recientemente el preso político Jerónimo Gandía, que sufría prisión en Isla de Pinos, falleció a consecuencia de las torturas y maltratos físicos que recibió en dicho establecimiento penal, por haberse negado a recibir adoctrinamiento.  [30]

31.      El día 11 de mayo  (1966), fue asesinado en la prisión de Boniato, en Santiago de Cuba, el preso político Sr. Arsenio Cruz que era colono del central  "Manatí"  en Victoria de las Tunas, el que se encontraba privado de libertad a virtud de acusaciones formuladas contra él, que lo señalaban como desafecto al régimen comunista cubano.  [31] 

32.     El 18 de junio de este año murió en la Fortaleza La Cabaña, en Cuba, el médico cubano Dr. Carlos Guerrero Costales, a consecuencia de los maltratos físicos y morales que sufrió, sin que recibiera la adecuada asistencia médica.  El Dr. Guerrero fue miembro del Directorio Estudiantil Revolucionario de 1930 y se encontraba preso desde el 7 de marzo de 1965.  [32] 



33.     Alrededor de los primeros de Septiembre del corriente año (1966) y en el reclusorio nacional de Isla de Pinos, fue muerto (asesinado) el recluso político Julio Tang Texier, a manos de uno de sus custodios.  Obligado a realizar trabajos forzados, sin que en su sentencia (causa No. 580 de 1960, por "delito contra los poderes del Estado") aparezca especificado dicho término, era sacado, junto con todos los demás reclusos, a tempranas horas de la madrugada, siendo devueltos a las  "circulares"  (edificios circulares donde residen los presos)  más allá de la puesta de sol.  Al parecer, este intenso trabajo y la falta de los más imprescindibles alimentos, minaron las jóvenes defensas físicas de Julio Tang; y una mañana, sintiéndose enfermo, negóse a salir a trabajar, alegando su deplorable estado físico.  Al parecer, el custodio no entendió estas palabras y trató de obligarlo por la fuerza.  Julio trató de protestar con voz más enérgica.  Un golpe de bayoneta tocó algún punto vital de su organismo y cayó al suelo manando abundante sangre.  Si en ese momento hubiera sido conducido al hospital y tratado adecuadamente, tal vez se habría salvado; pero fue dejado tendido en el suelo por más de cuatro horas, muriendo a consecuencia de la gran pérdida de sangre de su ya minado organismo. 

Julio Tang Texier, de 28 años de edad, fue juzgado en la causa 580 de 1960.  Sentenciado a 12 años de prisión fue ingresado en el Reclusorio Nacional de Isla de Pinos en el mes de mayo de 1961, donde estuvo hasta el día 3 de septiembre de 1966, en que murió.  [33] 

34.      El Tribunal Revolucionario número 1 de La Habana, condenó injustamente a seis años de prisión al abogado de La Habana, Dr. Juan Díaz Veronda, a quien no se le permitió defenderse.  Al comenzar a cumplir la sanción, debido a los maltratos físicos y morales, a que fue sometido, se suicidó en prisión, ahorcándose en la Fortaleza de La Cabaña.  [34]

D.      Tratamiento vejaminoso contra presos políticos en general, inclusive contra menores y mujeres presas.

35.      En la prisión de Boniato, en Oriente, se ha repetido con frecuencia el caso de vejámenes y maltrato a la persona de los presos, inducidos por el jefe de la prisión,  Sr.  García.  Un ejemplo de esta clase de hechos es el sucedido en días pasados, cuando cinco presos fueron pateados y golpeados brutalmente, y flagelados con un látigo hecho de alambre eléctrico, confeccionado por el propio García.  Dos de dichos presos tuvieron que ser trasladados al Hospital  de Santiago de Cuba, debido a su mal estado, uno de ellos con hemorragia interna y el otro con la clavícula fracturada a consecuencia de los golpes recibidos.[35]

36.      En la madrugada del pasado día 11 de julio, fueron sacados sin explicación alguna, al patio de la Prisión de La Cabaña, los ocupantes de las galeras 12, 13, 14, 16 y 17.  Una vez en el patio se les ordenó formar fila a lo largo de la pared.  Acto seguido, a una orden del jefe de Guarnición, la milicia comenzó a descargar bayonetazos y culatazos sobre los presos.  Como resultado de este hecho sin precedentes, fueron remitidos a la enfermería más de 80 heridos, muchos de ellos de gravedad.  En señal de protesta los presos desde ese día se han negado a recibir visitas.  [36]

37.     En el mes de mayo fueron instaladas en todas las cárceles de la Isla dobles rejas, con el fin de separar los familiares visitantes del preso.  Como consecuencia de esto, se tiene que hablar a gritos entre familiares y presos en días de visitas, ya que cada uno tiene una doble reja de dos metros de separación.  [37]

38.      Mi hermano Tomás Hilario Roca Méndez, después de haber sufrido varias prisiones sin antes habérsele celebrado juicio, fue aprehendido nuevamente cuando trataba de salir del país ilegalmente en una lancha, ya que allí se le hacía la vida imposible.

En todas estas prisiones y en ésta que se encuentra, ha sufrido vejaciones, maltratos y enfermedades  (artritis que adquirió por la humedad y el frío)  ya que no tienen con qué taparse y los sacan a altas horas de la noche al patio en ropas muy ligeras, con el pretexto de hacer registros, obligándolos a marchar.

Hace un mes trasladaron a mi hermano a Isla de Pinos, donde realiza trabajos forzados y lo hacen trabajar bestialmente.  [38]

39.      En el aspecto psicológico las vejaciones e insultos de todas clases se añadían a la suspensión parcial de la correspondencia, así como al aislamiento del mundo externo, con dos visitas al año como promedio, supresión absoluta de entrega de libros, periódicos, etc., con el decomiso de los existentes. 

A este clima embrutecedor de terror hay que agregar la mezcla intencionada de los presos políticos con otros de distinta condición:  criminales de guerra y malversadores de la depuesta tiranía, presos comunes, etc. 

Hemos sufrido incontables lesiones por bayonetazos, hasta un muerto inclusive.  No han dado culatazos y palos y cuatro reclusos han muerto al caerse de las circulares.  [39]

40.      El líder estudiantil cubano Pedro Luis Boitel, preso desde el año 1959 ha virtud de arbitraria sentencia por Tribunal Revolucionario, se encuentra gravemente enfermo debido a los maltratos físicos y psíquicos recibidos, habiendo sido totalmente incomunicado en la prisión de Isla de Pinos, no facilitándose los servicios médicos adecuados ni permitido a sus familiares que los visiten y le hagan llegar medicinas y alimentos necesarios dadas su crítica situación.[40]  

41.      Entre los enfermos que padecen avitaminosis, anemia crónica y desajustes mentales, psíquicos y de todo orden figuran infinidad de ciudadanos, hombre y mujeres, presos en inmundas celdas carentes de ventilación y sanidad.  Sobre todo existen mujeres que han cumplido las dos terceras partes de sus condenas y permanecen enclaustradas sin la remota esperanza de libertad.  Entre las mujeres presas figuran por su estado de salud precario Vivian de Castro, que ya intentó suicidarse, y María Amalia Fernández de Cueto, que sólo pesa 110 libras, acaba de ser operada de un quiste en un seno y sufre desequilibrios nerviosos y mentales de los que se puede dar fe entre las mismas reclusas.  [41]

42.     Se les levanta a las 4 de la madrugada.  Por desayuno se les da sólo un pan.  A las 9 de la mañana les dan 5 minutos para servirles el almuerzo que no pasa de 5 onzas en total.  A las 2 de la tarde les dan una comida parecida, que es incalificable cómo está hecha.  Esa es toda su alimentación.  No se les permite adquirir  (en la tienda de la cárcel)  con el dinero que sus familiares les han depositado, ni cigarrillos, ni azúcar prieta, ni nada absolutamente.  Al cabo de dos meses en dicha fortaleza, se les concedió una visita.  Allí sus familiares, a través de una reja de una pulgada de espesor, pudieron verlos.  Estaban depauperados, pálidos.  Parecían seres que habían venido de otro mundo.  Casi todos habían bajado más de 20 libras de peso.  [42]

43.      De la prisión de La Cabaña fui trasladado a la Isla de Pinos el 24 de febrero de 1961 a las 12 M., llegado a ésta la noche del mismo día.  El  "Comité" de recepción lo componía medio centenar de soldados armados con bayonetas caladas en sendos rifles, quienes gritaban:  -Vamos, que han llegado a la Isla, y aquí sí que los matamos y nadie se entera, etc.  Nos desnudaron completamente y al hacernos la requisa correspondiente, sólo nos dejaron una mínima parte de la ropa interior.  Los cigarros, la leche en polvo, las medicinas de los enfermos y hasta los retratos de nuestros familiares del sexo femenino nos lo robaron, incluyendo prendas, símbolos religiosos, etc.

No existía atención médica ni dental.  Yo mismo perdí 4 piezas por falta de atención.  Las enfermedades se propagaban intensamente, entre ellas:  las varicelas, la parotiditis, rubiola, sarampión, tuberculosis y otras infecciones como hongos, caspa, etc., y plagas como ladillas, piojos, chinches y mosquitos.

En diciembre de 1962 fui trasladado nuevamente para La Cabaña.  Había más de 2 mil presos en una cárcel habilitada solamente para 800  ó  900 a lo sumo.  Por la noche no se puede caminar sin tener que pisar un dedo o una mano de algún compañero que necesariamente tiene que dormir en el suelo.  El hambre hacía que los reclusos hirvieran las cáscaras de las viandas, cuando éstas entraban en el menú, o recogieran los desperdicios de carne, como el pellejo, etc., que botaban de la cocina.  Muchas veces yo mismo comí de esos desperdicios.

La soledad era terrible y muchas veces tuve que despertarme con una rata en el pecho o al sentir una picada de cienpiés u otros insectos.  Cuando mi organismo no respondía y me sentía enfermo, me gritaban:  -Estás enfermo, gusano?  iPues muérete!  El mismo día que salí, en la puerta de mi galera, fui golpeado por un miliciano, el cual, esgrimiendo su bayoneta, la descargó de golpe en mi pecho y en mis espaldas, porque solamente, me atreví a quejarme de los abusos cometidos en mi persona. [43]

44.      Existen en La Cabaña alrededor de 80 a 100 menores de edad, que cumplen condenas que oscilan entre tres y treinta años de reclusión.  Yo era uno de eses casos, en que siendo menor de 18 años fui condenado a 20 años  de prisión. 

Estos menores están separados en una sola galera, siendo vejados, maltratados y humillados constantemente, por considerar los milicianos que son  "peligrosos"  debido a su edad irresponsable.  Muchos de ellos están durmiendo en el suelo y sufriendo ya, a pesar de sus años, terribles enfermedades.  Muchos son sacados para un  "Centro de Rehabilitación".  que se halla ubicado en la ciudad de Marianao, en el cual, si se niegan a  "cooperar"  con la revolución, delatando a sus compañeros y cantando himnos comunistas, son tratados como bestias y arrojados nuevamente para La Cabaña, donde son internados en el  "chinchorro"  (lugar de castigo que está ubicado subterráneamente) o en las celdas llamadas capillas, que anteriormente detallara.  Algunos de estos menores tienen a sus padres presos, como en el caso de Oscar Pla Madruga, condenado a 5 años de prisión,

Con 16 años de edad, el cual tiene a su padre en Isla de Pinos y a su madre  en la cárcel de mujeres de Guanajay.  A continuación menciono algunos como: Oscar Pla Madruga, de 16 años de edad, condenado a 5 años; Roberto Núñez Varela, de 16 años de edad, condenado a 30 año; Alvaro Méndez, de 16 años de edad, condenado a 5 años; José A. García Vera, de 15 años de edad, condenado a 6 años; Manuel López Fernández, de 16 años de edad, condenado a 6 años; Carlos M. Salabarría, de 17 años de edad, condenado a 5 años, a quien le mataron a su madre en el siniestro G-2 de la calle 5ta. Y 14.  [44] 

45.      En las cárceles políticas de Cuba hay cerca de 2,000 mujeres sometidas a tratamientos que, además de ser inhumanos, violan todos los tratados. 

Mas de 350 mujeres están atacadas de males graves, sobre todo de tuberculosis, carecen de atención médica que, unido a la falta de alimentación hace bajas todos los días.

Las presas políticas de Cuba han dado a luz en sus propias celdas y más de una ha muerto de hemorragia e infecciones.  [45]

46.      En Guanajay, el director de Prisiones, Manuel Martínez, construyó un pabellón sin ventilación, sin higiene, que le llaman celdas tapiadas, sin agua y sin luz, y con un tremendo  "Vitafón"  que resuena en el interior de este pabellón tapiado y a toda voz le ponen la Internacional que es el  "himno comunista"  y no sólo ensordece a esas pobres mujeres sino a todos los demás pabellones que no sólo torturan a las 210 muchachas que están en la celda tapiada, sino que torturan psíquicamente a todas las presas, pues la inquina personal contra estas presas ya no tiene nombre; le dan harina de maíz a medio cocinar, a todas las tienen bajo la amenaza y el castigo en general, no pudiendo algunas aguantar más y se pasan el día llorando; otras prefieren ya adoctrinarse para poder salir.  Un grupo de ellas en su desesperación escriben una humillante carta al Primer Ministro para obtener su libertad.

Todas están muy mal, pero las del Pabellón D y las del Pabellón celda tapiada están peor, pues ellas han recibido golpes de Martínez y los milicianos.  (Martínez es el jefe de todas las prisiones).  No reciben visitas, ni jabas, ni correspondencia, y sus familiares no saben de ellas.  [46]

47.      El pasado mes de mayo  (1966) el joven estudiante cubano Antonio Llera Calderín, de 18 años de edad, vecino de San Cristóbal, en la provincia de Pinar del Río, fue acusado ante el Tribunal Revolucionario del Mariel, en dicha provincia, de desafecto al régimen.  Al acusado no se le permitió defenderse en el juicio y fue condenado a muerte por fusilamiento, sentencia que se cumplió inmediatamente después de dictada.  [47]


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